La Fundación de la Caja Vital alavesa tendrá este año un presupuesto de 7,6 millones para desarrollar sus actividades, un 46 % más que en 2015, y destinará buena parte de ese incremento a programas de formación y el empleo, que aumenta un 70 % y a asistencial social.
El presidente de la Fundación Vital, Fernando Aránguiz, ha presentado hoy los distintos programas con los que se pretende fomentar el empleo entre los más jóvenes, la calidad de vida de las personas mayores, impulsar a los emprendedores, apoyar a quienes sufren exclusión social, enfermedad o discapacidad y promover el arte local.
Tras unos años marcados por la adaptación al nuevo marco legal de las tres fundaciones (Vital, BBK y Kutxa) y los ajustes presupuestarios en un escenario de crisis, 2016 será «un punto de inflexión» para la fundación de la caja alavesa.
Además, dispone de unos fondos adicionales de 4,8 millones que, según ha aprobado el patronato de la Fundación Vital, tendrán como objetivo garantizar la continuidad de sus actuaciones y preservar la participación del 11 % que la fundación alavesa mantiene en Kutxabank.
Esto supone que contará en 2016 con unos fondos que ascienden a 12,4 millones de euros, según ha asegurado Aránguiz.
Las iniciativas de este año se han organizado en siete ejes de actuación: Área asistencial y social, Programas Mejora destinados a personas mayores de 55 años, Deporte, Nuestros jóvenes, presente y futuro, Formación y empleo para Álava, Oferta cultural y Patrimonio Histórico y Medio ambiente.
El presupuesto de Asistencia Social crece un 39,5 % y entre sus actuaciones destacan la colaboración con organizaciones que trabajan en favor de las personas que sufren exclusión social (Banco de Alimentos, Cáritas, Bultzain), enfermedad (Asociación contra el Cáncer, Aspanafoha, AFA-Alzheimer, Asafes), discapacidad (Zuzenak, Aspace, Apdema, ONCE, Itxaropena), o luchan contra la pobreza y la exclusión.
En este último apartado destaca el apoyo a Berakah, que reparte alimentos a 5.400 familias al año, prestándoles además asesoramiento psicológico, jurídico y en materia de autoempleo.
Asimismo, se mantendrá una parte muy importante del presupuesto destinada a subvencionar el alquiler social a través de Vitalquiler (869 viviendas).
El mayor incremento presupuestario, de un 71 %, será para la formación y el empleo, con la participación en el Consorcio de FP que consigue abaratar las matrículas de los estudiante y con Egibide, donde se financiará la conectividad vía wifi en todos sus centros de formación.
Becas Erasmus y de movilidad europea, o las de prácticas para perfeccionar inglés son algunas de las ayudas a estudiantes, a las que se suma la puesta en marcha de una bolsa de trabajo en colaboración con la Federación de Comercio y a los programas para la inserción laboral de discapacitados.
Prevenir la violencia machista e informar a los alumnos sobre el sida y el sexo, son otras de las iniciativas de este año, junto a las acciones formativas, deportivas, culturales y de ocio para mayores de 55 años, en las que participan anualmente más de 11.000 personas. EFE