(EFE).- El Ayuntamiento de Agurain/Salvatierra (Álava), gobernado por el PNV, ha condenado hoy el sabotaje de esta madrugada a una sucursal de Kutxabank y ha advertido de que ha podido tener consecuencias «irreversibles».
En un comunicado, el equipo de gobierno de Agurain/Salvatierra ha explicado que la explosión esta madrugada de un artefacto casero colocado en el cajero de Kutxabank en esta localidad, ha alterado la tranquilidad de los vecinos y ha proyectado una imagen de este pueblo «que no se corresponde con la realidad».
Ha advertido de que la explosión ha hecho que la puerta del cajero saliera despedida hasta el otro lado de la calzada y ha afirmado que aunque no ha habido que lamentar daños personales, si alguna persona o vehículo hubiera pasado frente a la sucursal en el momento de la explosión los daños habrían sido «irreversibles».
Por ello, el equipo de gobierno de Agurain/Salvatierra ha censurado la actuación de los autores del sabotaje y ha reivindicado para esta localidad su condición como «referente de progreso, tolerancia y convivencia».
