Un juzgado ha ordenado paralizar, de forma cautelar, el cierre del Servicio de Cirugía Cardíaca del Hospital de Basurto (Bilbao), así como el traslado de su personal al Hospital de Cruces (Barakaldo).
El Juzgado de lo Contencioso-Administratuvo numero 1 de Vitoria ha publicado un auto, al que ha tenido acceso Efe, con dicha decisión adoptada a petición de los médicos de Cardiología de Basurto contra la orden de Osakidetza que establecía dichos cierre y traslado para el próximo 17 de noviembre.
Esta «suspensión cautelar urgente», que estará vigente mientras se sustancia el procedimiento principal de demanda presentado por los médicos, se justifica en que, de no concederse, existirían «perjuicios irreparables tanto para los recurrentes como para terceros (pacientes)».
Según se argumenta, si el servicio «se cierra y se desmonta, deja de existir» y si finalmente se admite la demanda en sentencia firme «será poco menos que imposible volverlo a montar desde cero».
El auto añade que, además, el personal sanitario que trabaja actualmente en el servicio «integrará» otras unidades «o habrá perdido actualización en la disciplina» porque la «inexistencia de un plan de ordenación de recursos humanos» hace que los recurrentes «desconozcan cómo se les va a reasignar».
«Se crearían situaciones jurídicas irreversibles que harían ineficaz la sentencia», según se indica.
Sin esta medida cautelar, un futura sentencia a favor de los demandantes también afectaría a la oferta docente y a los trabajos de investigación del citado servicio y este perjuicio «sería irreparable de manera económica».
La resolución también tiene en cuenta los «perjuicios» para los pacientes y cita a la Sociedad Española de Cardiología, que ha concluido que existe mayor mortalidad de pacientes cardíacos cuando ingresan en hospitales sin servicio de cirugía cardíaca.
«El interés general conduce en este caso, de forma indiciaria, a mantener los medios existentes y no cerrarlos, ni trasladarlos, ni refundirlos. El servicio debe considerarse desde su necesidad, antes que desde su eficiencia», se determina.
En el auto se hace también un «examen somero y no completo» del origen de esta controversia entre Osakidetza y los médicos del Servicio de Cirugía de Basurto, y establece que la orden de cierre y traslado redactada por Osakidetza «regula las consecuencias de una unificación» con Cruces «pero no adopta un acuerdo de unificación razonado y motivado».
«Al no haberse expresado las razones de la actuación, no se conocen los motivos y no puede ponderarse por los afectados y por los ciudadanos el balance del coste-beneficio» a la vez que «dificulta el posterior control judicial del acierto o corrección de la decisión administrativa de arbitrio».
Contra este auto no cabe recurso.
OSAKIDETZA
El Departamento de Salud y la Dirección General de Osakidetza ha mostrado su sorpresa por el auto debido a que, en su opinión, el juzgado entra a determinar cuestiones de fondo sobre la necesidad o no de trasladar este servicio» cuando argumenta que “es indudable que el servicio de cirugía del hospital de Basurto, antes que desde su eficiencia, debe considerarse desde su necesidad, y, en este caso, por las tres razones apuntadas, debe concluirse a efectos cautelares que es necesario”.
Para la Consejería de Salud y Osakidetza, este es un asunto «de carácter de gestión asistencial, cuestión que corresponde precisamente al Departamento y a Osakidetza como garantes de la prestación sanitaria a través de los servicios que configuran el sistema sanitario de Euskadi, competencia exclusiva del poder ejecutivo».
Critican también que no quepa «opción de recurso» a dicho auto, «adoptándose la resolución sin oír al Departamento de Salud y otorgando únicamente tres días para presentar alegaciones, algo que supone la desprotección del interés que, en la prestación de los servicios sanitarios, tiene encomendado el Servicio Vasco de Salud y que es lo que motiva esta decisión».
La consejería y el Servicio Vasco de Salud reiteran, por último, que «la Cirugía Cardíaca de Osakidetza ni desaparece ni se cierra», sino que se prestará desde el hospital de Cruces-Barakaldo y que su concentración en este centro médico «lleva forjándose cinco años», aunque haya sido ahora cuando se ha decidido ejecutarla. EFE
A la gochone de la osakidecha le ha dado un sincope, el ukuyu rezará unas jaculatorias por la recunducción según la constituciónyelestatuto y el gova de la cav trasladará que disiente respetuosamente en los términos más adecuados en derecho. A mí plin, que llevo chanclas.
Si los juezes van a interferir y tener la última capacidad de decisión en el ámbito de la administración pública mejor elegimos entre todos sus órganos de gobierno por votación directa y no los partidos políticos ultras que niegan acuerdos de tres quintos parlamentarios, como ocurre ahora.
[…] fue en Vitoria cuando se produjo la paralización de ese cierre en Bizkaia. Fue en un juzgado. Y ahora se certifica la […]
[…] fue en Vitoria cuando se produjo la paralización de ese cierre en Bizkaia. Fue en un juzgado. Y ahora se certifica la […]