celsa laminaciones arregui

El comité de empresa de Celsa Atlantic, la antigua Laminaciones Arregui, ha exigido a la dirección de este grupo siderúrgico un plan industrial que garantice la viabilidad de las dos plantas de Álava a medio y largo plazo frente a la amenaza de nuevos despidos.

El presidente del comité de empresa, David García, ha explicado a Efe que la empresa tiene intención de despedir a 11 personas de manera individual, como ya ha hecho con otro trabajador alegando absentismo, y lo hará sin recurrir a un ERE de extinción, dado que no se superará el 10 % de la plantilla.

En las dos plantas que Celsa tiene en Álava, una en Vitoria y otra en Urbina, trabajan 117 personas.

El comité recuerda que estas dos fábricas están inmersas en procesos de suspensión de empleo desde 2016, con dos ERTE en 2016 y 2018, que no fueron recurridos por el comité ya que ese año «se encauzó el conflicto» y comenzó la negociación, tras años convulsos, con una huelga indefinida incluida, por los despidos y medidas puestas en marcha desde 2012.

Para el comité, en estas últimas semanas se ha producido un «cambio de rumbo» y se ha vuelto «a épocas pasadas» con nuevos despidos, según ha denunciado este lunes en un comunicado.

El comité ve «inaceptable» la destrucción de «casi 20 puestos de trabajo», entre despidos y traslados, lo que responde a «una decisión estratégica del Grupo Celsa de castigar a estas plantas por no aceptar aquellos despidos y recortes en el año 2012, y con ello, parece querer llevarlas a una muerte lenta, intentando rehuir las sentencias que se produjeron entonces».

La representación de los trabajadores pide por tanto evitar la destrucción de empleo mediante inversiones que diversifiquen la gama de productos. Anuncia que iniciarán movilizaciones «de menos a más» para forzar a la dirección a volver a «parámetros de negociación», al tiempo que pide al Gobierno Vasco que se implique en la defensa de la actividad en estas plantas. EFE



Dejar respuesta