El diputado general de Álava, Ramiro González, y candidato del PNV a la reelección ha considerado este martes que si el mantenimiento del estadio de Mendizorroza requiere «muchos millones de euros», pensar en una remodelación del campo «que pueda durar décadas» es «razonable y de sentido común».
En la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno foral, González se ha referido a las discrepancias que han mostrado en los últimos días el Ayuntamiento, propietario del estadio, y el Deportivo Alavés sobre quién debe asumir la reparación de la cubierta, que tiene goteras.
«Si es necesaria una inversión muy importante para abordar el mantenimiento del campo, de muchos millones de euros, quizá sea tiempo de volver a plantear un proyecto de futuro que pueda durar décadas» y que esté «al nivel de un equipo de Primera División», categoría a la que el Alavés «tiene oportunidades» de regresar este año, ha señalado.
En este momento no hay un proyecto sobre la mesa, ha reconocido González, pero si se presentara uno «razonable» la Diputación daría también un apoyo económico «razonable», como ya hizo la institución foral con el proyecto impulsado por el Alavés en 2016, que finalmente fue paralizado por la llegada de la pandemia.
En todo caso, ha recalcado el diputado, no se trata de una cuestión que «corresponda» a la Diputación Foral.
La remodelación de Mendizorroza que el club presentó en su momento contemplaba aumentar su aforo hasta los 27.000 espectadores y poner fin además a los graves problemas estructurales motivados por la longevidad del estadio, construido en 1924, aunque con reformas posteriores.
El presupuesto se estimó en 55 millones de euros, con una financiación repartida en 33 millones que aportará el club albiazul, 8 el Ayuntamiento, 7 el Gobierno Vasco y otros 7 la Diputación Foral de Álava.
La tramitación del proyecto estaba muy avanzada pero con la llegada de la pandemia se decidió posponerlo, ya que las instituciones decidieron centrar sus recursos en la atención sanitaria y en el refuerzo a los colectivos más afectados.
¿No les parece a ustedes, sesudos políticos vascos, alaveses y vitorianos, que la ciudad de Vitoria tiene urgente necesidad de otras muchas reparaciones, saneamientos y servicios, todo mucho, muchísimo, más necesario, que gastarse ese montón de millones en reparar un campo de fútbol?
Y soy tan aficionado al futbol como el que más, pero viendo como nos está dejando la ciudad este inútil e incapaz alcalde que padecemos y pronto perderemos de vista, creo que, como dijo Nabucodonosor «Primero dios y después los ángeles».
Con mis impuestos para arreglar el campo no, gracias….Que lo paguen los que les gusta el fútbol….