La Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras (CCOO) en Cantabria ha puesto un ejemplo en una jornada sanitaria en las Urgencias del Hospital de Laredo: «Desde las 19.00 horas, las ambulancias con destino al Hospital de Laredo se han desviado al Hospital Valdecilla o al de Cruces porque había más de cinco horas de espera, 25 pacientes sin atender en la sala de espera y una urgencia vital que paralizaba la atención”.
Los problemas de este hospital forman parte ya de las conversaciones de los vizcaínos que se han trasladado a su segunda residencia de Laredo este verano.
El sindicato asegura que en esa jornada “únicamente había dos facultativos trabajando”, como ha subrayado Carlos Ateca, secretario de Negociación Colectiva de la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO en Cantabria, para quien “a la Consejería de Sanidad no le interesan las urgencias porque el tiempo de espera y el riesgo para la población no se ve reflejado en las listas de espera-
El sindicato ha reclamado “un programa de contingencias para que aquellas y aquellos profesionales que, voluntariamente, quieran cubrir servicios necesarios para la población, y que toda la jornada que se realice de esta forma sea debidamente retribuida”, ha incidido Ateca, que critica que “la Consejería se ha preocupado de la firma de un acuerdo al margen de la mesa sectorial que no va a resolver la ausencia de profesionales, al igual que no lo resolverá el acuerdo de puestos de difícil cobertura que no firmó CCOO”.
“El problema al que nos enfrentamos este verano es muy serio, teniendo en cuenta que aumenta la población en la zona exponencialmente mientras el número de facultativos que atienden la urgencia se reduce a la mitad”, ha alertado Ateca. El sindicalista ha detallado que “actualmente, hay diez profesionales para atender una asistencia que se duplica y la administración no aplica soluciones”.
CCOO reclama de la consejería de sanidad un plan de contingencia y la apertura de una mesa de retribuciones en la que se realicen las mejoras necesarias para que no haya discriminación entre profesionales y afianzarlos en el Servicio Cántabro de Salud, en vez de marcharse a otros servicios de salud, concluyen.
Laredo multiplica por 10 su población en verano, pasa de 11.000 a 100.000 habitantes. Sobretodo vizcaínos. También hay que decirlo.
Propongo, que entre otras medidas, los liberados sindicales trabajen.