La Junta de Gobierno Local ha adjudicado hoy el contrato de las obras de rehabilitación energética del centro cívico Judimendi con el objetivo de reducir un 43 % el consumo de energía primaria no renovable de la instalación.

Cerrará más de un año y piden paciencia a los ciudadanos

Además de la eficiencia energética, también se conseguirán importantes mejoras en seguridad y accesibilidad. Dada la envergadura de la obra, este equipamiento permanecerá cerrado al público durante los quince meses de obra a partir del próximo mes de junio, una vez finalizada la programación de cursos actualmente en marcha.

Esta inversión está alineada con la estrategia del Ayuntamiento de mejora energética de sus edificios para hacerlos más sostenibles y eficientes. Además de unas instalaciones renovadas disminuirá las emisiones de CO2 un 43%”, ha explicado Borja Rodríguez, concejal de Modelo de ciudad, Urbanismo y Medio Ambiente.

Las obras, adjudicadas a la empresa OCISA, van a suponer una inversión de 4.219.235,35 euros por parte del departamento de Modelo de ciudad y Urbanismo. De la misma manera, se va a aprovechar la intervención para la “adecuación de la instalación al reglamento de desarrollo de la Ley de Espectáculos Públicos y actividades recreativas, así como adecuar el centro cívico a las condiciones de seguridad en caso de incendio”.

Aislamiento y fachada ventilada

Los trabajos se van a centrar tanto en el exterior como en el interior del recinto con actuaciones en la fachada, cubiertas y también en el interior del edificio. En las cubiertas del edificio se va a proceder a instalar una capa de aislamiento de entre 10 y 16 centímetros de lana mineral.

En lo que respecta al interior del centro cívico, los trabajos plantean mejorar el comportamiento energético, para lo que habilitaremos un sistema de recuperación de energía en la renovación del agua de la piscina”.

El proyecto contempla también un nuevo generador fotovoltaico de 69,66 Kilowatios-pico, en régimen de autoconsumo. Se aprovechará la complejidad de la intervención para llevar a cabo una redistribución de los aseos del centro cívico, “sectorizar el edificio para mejorar la seguridad, en caso de incendio y evacuación del mismo y la instalación de una nueva pasarela en la primera planta”, ha finalizado Rodríguez.

Decisión unánime de cierre temporal

Por su parte, la concejala de Gobierno Abierto y Centros Civicos, Miren Fernández de Landa ha recordado que la red de centros cívicos nació hace 40 años. “Los 14 centros de los que hoy disponemos constituyen una parte esencial del ADN de esta ciudad porque -ha subrayado- son espacios de transformación, cercanía y cohesión social, que promueven la igualdad en el acceso a los servicios públicos para todas las personas que vivimos en Vitoria-Gasteiz. Fomentan la convivencia, el encuentro intergeneracional y el acceso a la cultura, el deporte y la atención social”. Una red que en 2024 contabilizó 6.151.252 usos.

Con el paso del tiempo, los centros cívicos necesitan mejoras -que se van realizando de forma planificada- y actualizaciones derivadas de las nuevas normativas. En el caso de Judimendi, la instalación cumplirá 35 años en abril y va a afrontar una mejora imprescindible y de gran envergadura. Ante las importantes afecciones que tendrá la obra y atendiendo al criterio del Departamento de Urbanismo, el Servicio de Seguridad y Salud Laboral y el de Mantenimiento, los Departamentos municipales implicados en la organización de actividades (Gobierno Abierto y Centros Cívicos, Deporte, Cultura y Políticas Sociales) han tomado la decisión unánime de cerrar la instalación durante las obras. Fernández de Landa ha argumentado que es la única vía para garantizar la seguridad de las personas usuarias y del personal que trabaja en el centro, así como proteger los espacios, los materiales y el mobiliario que alberga.

“La decisión ha sido difícil de tomar dado que 365.000 personas utilizaron este centro cívico el año pasado. Por eso, pero nos hemos puesto manos a la obra para planificar alternativas con el fin de mitigar dentro de lo posible el impacto del cierre temporal”, ha señalado Fernández de Landa.

Servicios esenciales

A la hora de planificar alternativas, el Servicio Social de Base es uno de los considerados esenciales. Por eso, se garantiza la atención ordinaria y de urgencia en el centro cívico y BIZAN de Arana, un barrio próximo al que se trasladará todo el equipo humano de Judimendi. La atención individual y familiar se realizará en esas instalaciones, con visitas a domicilio si es preciso.

También son de carácter esencial el Servicio de Información Ciudadana y la Oficina de Atención Ciudadana. Por ese motivo se reforzará la comunicación para dar a conocer los centros cívicos donde se pueden realizar trámites y solicitar información y se potenciará la difusión de otros canales de atención, como el teléfono 010 y la videoatención, que se prevé esté disponible en septiembre. Además, se intensificará la utilización de las máquinas de autotramitación ayudando a manejarlas a quien lo necesite. Paralelamente se busca un espacio alternativo en el barrio para, si es posible técnicamente, habilitar una oficina provisional de atención ciudadana e información.

En lo relativo a las actividades sin programación específica, se reforzarán las mismas en los centros cívicos del entorno (los más próximos son Arana, Salburua y Hegoalde). En relación a las bibliotecas, el espacio expositivo, la sala de encuentro, las canchas deportivas, etc., se están buscando alternativas.

En el caso de la actividad organizada en las instalaciones deportivas, habrá que reubicarla en otros espacios. Por eso, se está trabajando para optimizar al máximo los recursos disponibles, no solo de carácter municipal en la zona, sino también con otros equipamientos que pudieran ser susceptibles de uso.

La natación escolar y los programas acuáticos para personas con discapacidad tendrán espacio reservado en piscinas cercanas, y se posibilitará la continuidad a quienes hayan iniciado las clases natación para que puedan culminar su aprendizaje.

En lo relativo a la programación anual de cursos, que no podrá realizarse en Judimendi en el curso 2025-26, se está viendo la posibilidad de reforzar la oferta en otros equipamientos alternativos. “Es importante resaltar que los centros cívicos no funcionan de manera aislada, sino como una red. Esta es precisamente una de   sus mayores fortalezas y lo que posibilitará mantener parte de la oferta de actividades en otra ubicación, ha señalado la responsable. En cuanto a las actividades comunitarias del barrio, tales como la Navidad, el Carnaval, el fin de curso escolar…, se intentarán mantener en la medida de lo posible.

Transparencia y claridad

El personal del centro cívico Judimendi es tanto municipal como de empresas y se está trabajando para que tenga la menor afección posible. Entre las alternativas, se contemplan reubicaciones de los servicios, refuerzos en otros espacios que acogerán parte de la actividad del centro cívico y posibles reestructuraciones puntuales de tareas.

La idea del Departamento de Gobierno Abierto y Centros Cívicos es ir comunicando todos los cambios que se produzcan con transparencia y claridad“Mi puerta está permanentemente abierta para cualquier demanda o duda”, ha afirmado la concejala. “Somos conscientes de que estas obras van a generar muchas molestias, pero apelo a la paciencia y la comprensión de las personas afectadas porque la obra, además de ser imprescindible, conllevará importantes mejoras”, ha concluido.

1 COMENTARIO

  1. Mira, te ahorrarás lo que quieras, pero cerrar un centro cívico durante 15 meses … Decídselo a los chinos y construyen uno al lado en 6 meses.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí