Fue en verano de 2014. Vitoria vivió de primera mano la polémica sobre el uso del burkini  en las piscinas de la ciudad. Ahora es un debate lanzado en varias ciudades europeas (Londres, Niza…), entre partidarios de prohibirlo en piscinas y playas, o defensores de la libertad de vestir como deseen.

Hace dos años, el entonces alcalde de Vitoria, Javier Maroto, recordó que el reglamento prohíbe bañarse en las piscinas municipales con ropa de calle. Mientras en Europa se debate solo la vestimenta, en Vitoria fue sobre el momento del baño.

Una instrucción que se trasladó y recordó a los socorristas. Tenían que exigir la salida del agua si se vestía de esa forma. La polémica apareció tras una fotografía en la que se veía a una mujer en Gamarra con velo y ropa en el interior de una piscina.

Esta prohibición se extendía a otros ejemplos: bañarse con pantalones, calzoncillos bajo los bañadores…

El propio Maroto reconoció en aquellas fechas que recibió, verbalmente, una solicitud de la comunidad musulmana relativa a la posibilidad de habilitar horarios especiales para ellos, piscinas específicas, o facilitar monitores para que les ayudaran con sus hijos cuando ellas no podían entrar al agua.

«Las piscinas municipales son iguales para todos y hay que utilizar el traje de baño», dijo entonces el ex alcalde.



3 Comentarios

  1. Bien por Maroto . Esa decisión fue correcta. Pedir horarios para ellos en exclusiva? Alucinante. En Francia lo acabarán prohibiendo porque es un atentado contra la libertad de la mujer. No me creo que lo lleven voluntariamente. Pero como aquí vamos de progre… Pues así nos va

  2. ¿ Es eso integración ?
    Ya no se trata de si es su costumbre, su religión, o si así se lo ordena el marido. Se trata de cumplir una ordenanza que ahí está.
    ¿ Que pasaría si reclamaremos todos el mismo derecho y nos bañariamos vestidos ?

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