Vaya perra se agarraban los niños junto a la pista de hielo a cuenta de un globo de luces de helio que está siendo la sensación en la ciudad. ¡Cuesta 8 euros!
Era verlo en un puesto ambulante, y los niños reclamaban a sus aitas un ejemplar. El que salía con éxito se colocaba en una cola importante y muchos minutos de espera.
El que no lo conseguía se llevaba un burro de los de época.
Es la sensación en estas navidades, habituados a globos de animales o de personajes de los dibujos animados.
Eso sí, en cuanto se desinfla un poco, las luces se caen. Dura la justito.
