Segunda etapa en Vitoria de los ladrones. Primero iban a por bicis normales o chungas. Ya han decidido que van a por las caras. Es la semanita que llevamos.
Empezó con una de 12.000 euros. Y aunque las siguientes no alcanzan ese nivel, son ya de importancia. Ocurrió ayer.
2.000 EUROS. LADRÓN HABITUAL ¿Sigue en la calle?
Agentes de Policía Local detuvieron en la tarde de ayer a un hombre de 62 años como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación. Los hechos ocurrieron poco antes de las 16:00 horas cuando una patrulla que se encontraba interviniendo por otro motivo en la Plaza de los Desamparados observó a varios vigilantes de seguridad de un centro comercial próximo forcejeando con un varón a la entrada del local.
Así las cosas, los agentes se acercaron para comprobar lo que ocurría y fueron informados de que dicho hombre había intentado sustraer una bicicleta que estaban arreglando en el taller por un valor en torno a los 2000 euros. Durante el forcejeo con el personal de seguridad, la bici cayó al suelo y resultó dañada. El presunto ladrón, además, portaba otros artículos de posible procedencia ilícita, ya que conservaban la alarma, por lo que le fueron incautados.
En vista de los hechos, los agentes procedieron a la detención de este varón que ha protagonizado otros hurtos en los últimos días.
¿Es este señor de 62 años?
1.000 euros y persecución de la mujer
Agentes de Policía Local detuvieron a última hora de la tarde de ayer a un hombre de 28 años como presunto autor de un delito de hurto de bicicleta.
Los hechos sucedieron poco antes de las 20:30 horas cuando una llamada al 092 solicitaba presencia policial en la calle Francia ya que habían sustraído la bicicleta a una mujer y ésta se encontraba siguiendo al presunto ladrón. A la llegada de la patrulla al lugar, la demandante señaló a los agentes un varón que caminaba por dicha calle como el responsable de los hechos.
Al parecer, minutos antes, la mujer había dejado su bicicleta en el exterior de un establecimiento comercial de la calle Prudencio María Verástegui y el hombre aprovechó la ocasión para cogerla y tratar de huir montado sobre ella. Sin embargo, su dueña fue avisada por una de las dependientas y salió tras él.
Al verse perseguido, el varón arrojó la bicicleta y se marchó sin ella, por lo que su legítima dueña pudo recuperarla. Dado que el valor del vehículo rondaba los 1000 euros, y tras escuchar las versiones de la víctima y un testigo, la patrulla procedió a la detención del varón.
