Guardian Glass ha confirmado que iniciará el proceso de apagado del horno en su planta de Llodio (Álava) mañana miércoles 29 de enero, un enfriamiento que considera debe hacerse con carácter de urgencia.
Tras el apagado del horno, la multinacional estadounidense cerrará de esta factoría en el plazo de seis meses, lo que supondrá el despido de sus 171 trabajadores.
En un comunicado, la dirección de la empresa ha insistido en las razones para justificar el apagado del horno -un proceso que dura varios días-, y en que «entiende las preocupaciones» de las partes interesadas, tras las protestas de los trabajadores, que han convocado una huelga, y del Gobierno Vasco por el cierre.
El motivo para llevar a cabo el enfriamiento inmediato del horno es su estado: según la compañía, la preocupación crítica está relacionada con la pared posterior del horno, donde parte de la zona superior del refractario se cayó, y la mayoría de los bloques del lado derecho están significativamente agrietados.
Según la dirección, este tipo de daño no ha sido visto por Guardian en ninguno de sus hornos. El bloque del arco de entrada del baño de estaño también tiene una grieta significativa.
Con la situación actual, cualquier cambio térmico en el área de la pared trasera, o cambio en los flujos del vidrio dentro del horno provocado por un evento no planificado o una «retención caliente», sería muy probable que condujera a una brecha de contención que resultara en una fuga de vidrio difícil de controlar y en daños en la estructura del horno «de una magnitud y resultado impredecibles, lo que conlleva un riesgo de seguridad considerable para los empleados».
Ante este estado del horno, la compañía considera que el enfriamiento debe llevarse a cabo con carácter de urgencia, por lo que ha confirmado la fecha de inicio del enfriamiento para mañana 29 de enero.
Según ha explicado, el enfriamiento planificado es un proceso controlado, con un alcance adecuado de acuerdo con la condición crítica del horno, con estrictas medidas de seguridad y protocolos de prevención.
El horno frío podría reconstruirse, según la empresa
Si bien la compañía no contempla una inversión para una reconstrucción, el horno frío podría reconstruirse en una etapa posterior, ha avanzado.
Guardian ha informado a Osalan -el instituto de seguridad laboral- y a la Inspección de Trabajo sobre la fecha del enfriamiento con toda la documentación sobre el proceso de enfriamiento. Ayer, el delegado de prevención en el comité de empresa denunció que no había comunicado el plan a Osalan.
También ha respondido, aunque sin citarla, a la petición de ELA ante el Tribunal Superior Vasco para que suspenda el apagado del horno.
Según la dirección, cualquier maniobra de tipo legal o de cualquier otro tipo que pueda ser activada por cualquier parte interesada para evitar que el enfriamiento ocurra el 29 de enero y forzar un mantenimiento en caliente del horno o continuar operando más allá de esa fecha «conllevaría un riesgo para la seguridad del personal y daños materiales en las instalaciones que Guardian no puede aceptar».
Guardian «entiende y tiene en cuenta las preocupaciones de todas las partes interesadas, incluido el Gobierno Vasco».
Está prevista una reunión con los representantes del Gobierno Vasco este mismo martes para proporcionar detalles sobre la situación y el plan de acciones de Guardian, información también ha sido comunicada al comité de empresa. EFE
