El ciclista alavés Mikel Landa acabó ayer en tercer lugar el Giro de Italia, y como corresponde, subió al podio a recoger su premio. Durante toda la ceremonia no se quitó la gorra de su equipo. Tampoco cuando sonó el himno español en honor al vencedor Alberto Contador.
Y ya ha supuesto decenas, cientos de críticas en medios de Madrid y en las redes sociales que lo han considerado una descortesía.
Este fin de semana, y tras la polémica suscitada en la final de la Copa del Rey de fútbol, la suspicacia de algunos sectores está muy revuelta y no han tardado en aparecer voces críticas con Mikel Landa.