El Gobierno Vasco obligará a las empresas agrarias a declarar los contratos que realicen a temporeros agrarios, lo que permitirá conocer el número de trabajadores y sus alojamientos para poder gestionar las pruebas PCR de covid-19 que se lleven a cabo y garantizar su asistencia sanitaria en caso necesario.
Ante el aumento de la contratación de temporeros para la recolección de uva, especialmente en la Rioja Alavesa, y de otros productos como la patata, el Gobierno Vasco ha adoptado varias medidas preventivas para reducir el riesgo de contagio de coronavirus.
Este jueves los departamentos vascos de Desarrollo Económico y de Salud han confirmado que el 31 de agosto entrará en vigor una orden que determina esa obligatoriedad de declarar los contratos de temporeros que se realicen, para lo que tendrán un plazo de siete días, hasta el 8 de septiembre.
En el protocolo de seguridad higiénico-sanitaria para explotaciones agrarias que ha elaborado el Instituto Vasco de Salud y Seguridad Laboral, Osalan, se detallan las «buenas prácticas» que deben implementar en las empresas que contraten a temporeros y en los alojamientos que se habiliten.
El Departamento de Salud han anunciado que establecerá las actuaciones correspondientes de control y seguimiento sanitario de los temporeros y definirá las pruebas PCR que considere oportunas realizar.
También Salud se encargará de adoptar las medidas de aislamiento de los contagiados y de sus contactos estrechos y se habilitarán espacios para las cuarentenas. EFE
