La Fiscalía pide en sus conclusiones provisionales 99 años de prisión para la exjefa de ETA Soledad Iparraguirre, Anboto, por los asesinatos de un cartero -que la banda terrorista consideraba confidente de las fuerzas de seguridad- en 1985 en Amurrio (Álava) y de un policía nacional en 1995 en Bilbao.

La Audiencia Nacional ha señalado los juicios a Anboto por ambos asesinatos para los próximos martes y miércoles respectivamente.

Estos juicios se celebrarán después de que el pasado mes de febrero el Tribunal Supremo confirmara los 122 años de prisión impuestos a Anboto por ordenar el asesinato del comandante del Ejército de Tierra Luciano Cortizo en 1995 en León al explotar una bomba lapa bajo el asiento de su coche cuando conducía con su hija, que resultó herida grave.

El alto tribunal ratificó así la sentencia que dictó la Audiencia Nacional en el primer juicio al que se enfrentó Anboto en España, después de ser entregada en 2019 por Francia, donde ya cumplió varias condenas, para ser juzgada por doce causas.

En enero la Audiencia Nacional la absolvió en la causa en la que estaba acusada de haber ordenado el atentado contra el cuartel de la Policía Nacional de Buenavista en Oviedo en 1997, al considerar que ya era una «cosa juzgada» tras haber sido ya condenada en Francia como dirigente de ETA y por preparar atentados en España estando en el país galo, donde se instalaba la cúpula etarra.

Para el juicio del martes, la Fiscalía pide en sus conclusiones provisionales 39 años de cárcel para Anboto por participar en el asesinato del citado cartero en Amurrio el 26 de junio de 1985 cometido por el comando Araba de ETA.

En su escrito de acusación, el Ministerio Público relata que Anboto y otros dos etarras ya condenados por estos hechos, Juan Carlos Arruti y José Javier Arizcuren Ruiz, rodearon al cartero cuando iba a su trabajo en bicicleta y estos dos últimos dispararon con sus armas a la víctima, que falleció.

Para el juicio del miércoles, la Fiscalía pide 60 años de prisión para Anboto por ordenar al comando Itsasadar de ETA el atentado en las oficinas de expedición del DNI en Bilbao en el que a consecuencia de los disparos de los terroristas murió un policía nacional y otro resultó gravemente herido el 13 de enero de 1995.

El fiscal explica que este segundo agente sufrió tetraplejia que provocó su invalidez permanente y un acortamiento de la esperanza de vida. Falleció en 2003.

La Fiscalía acusa también a Anboto de entregar al comando material explosivo, dos pistolas, un subfusil, cuatro cajas con balas y dinero. EFE



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