Colectivos memorialistas y de víctimas de la violencia policial agrupados en la plataforma Memoria Osoa han denunciado que es una «humillación y una afrenta» la distinción de la Fundación Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo con la Medalla de Oro de la ciudad por parte del Ayuntamiento de Vitoria.
Memoria Osoa, que incluye a quince de esas asociaciones, se ha concentrado en la capital alavesa, donde ha dado lectura a un comunicado en el que se muestra su rechazo absoluto a esta decisión, también rechazada por EH Bildu.
Poco antes de esta concentración, la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, ha asegurado sobre esta protesta que la Fundación se merece la distinción «con argumentos de sobra y de peso». «Respeto todas las opiniones, pero me da tristeza pensar que todavía hay mucha gente que tiene por delante un recorrido ético», ha lamentado.
Desde la plataforma, su portavoz Nerea Martínez ha criticado que el Centro Memorial tiene como objetivo «la imposición de un relato oficial que parte de los que niegan la existencia de más víctimas a las que no reconoce el memorial» y que, además «hace abstracción de la exigencia a los victimarios vinculados al Estado».
«Distinguir con el más alto galardón de la ciudad a la imposición de un relato sesgado es una humillación y una agresión sin parangón», ha insistido Martínez, quien ha agregado que además es «contraria al modelo de convivencia de la sociedad vasca».
En este sentido, el comunicado señala que «todavía hay víctimas de vulneraciones de derechos humanos generadas por la violencia de Estado» que están en fase de reconocimiento a través de diversas leyes que reclaman que los poderes públicos «impulsen y faciliten».
Por ello, ha insistido en que queda trabajo por hacer para reconocer a las totalidad de las víctimas de todas las violaciones de derechos humanos «sin excepción».EFE
Las violaciones de los derechos humanos durante la Guerra y la durísima represión de la posguerra y la dictadura franquista fueron condenadas en el informe de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, adoptado en París el 17 de marzo de 2006.
Los hechos descritos por el Consejo de Europa señalan que durante la Guerra de España se cometieron gravísimos crímenes y que durante la posterior dictadura franquista se estableció un sistema político autoritario que reprimió masivamente todo atisbo de oposición política.
Como indica el referido informe del Consejo de Europa, en España se produjeron de manera sistemática desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias, políticas de campos de concentración, trabajos forzados, torturas, violaciones e incluso secuestro masivo de recién nacidos bajo una política de inspiración “genética”.
MENTIRAS Y MÁS MENTIRAS te recuerdo que solo en Álava empezaron matando labradores desarmados (primeros muertos en Álava)en un pueblo del pantano y a consecuencia de ello terminaron con 600 muertos,
eso que mataron a los labradores desarmados hoy tienen monolitos, pero a los labradores ni siquiera pusieron todos lo nombres porque al menos falta, un secuestrado por esos angelitos de 80 años al que después quemaron su casa como al resto de labradores asesinados que ya nadie vio con vida después
esos angelitos fueron fusilados con leyes repúblicas por jueces republicanos
La ciudadanía tiene actualmente el derecho inalienable al conocimiento de la verdad histórica sobre el proceso de violencia y terror impuesto por el régimen franquista, así como sobre los valores y los actos de resistencia democrática que llevaron a cabo quienes cayeron víctimas de su represión.
Se erigieron monumentos conmemorativos y panteones por todo el país, se inscribieron los nombres de los “caídos” en placas en las iglesias, se establecieron fechas conmemorativas y se nombraron municipios, infraestructuras, calles, plazas, montes y avenidas en honor de personajes impulsores del golpe de Estado, de la dictadura o de hechos considerados gloriosos por el régimen franquista, empezando por uno llamado Memorial Víctimas del Terrorismo en Gasteiz, en el cual haciéndolas pasar por víctimas, se hacen honores a «victimarios como Melitón Manzanas y Clément Perret, premiando trayectorias antidemocráticas y vulneradoras de los derechos humanos”. Condecorar a trayectorias antidemocráticas y vulneradoras de los derechos humanos», son “una burla a la propia Ley de las Víctimas del Terrorismo”.
La ciudadanía tiene actualmente el derecho inalienable al conocimiento de la verdad histórica sobre el proceso de violencia y terror impuesto por el régimen republicano