En cuanto las cosas se han puesto serias en el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz se le han visto todas las vergüenzas al ‘alkate Gorka Urtaran‘. Tras el guirigai que tiene montado con el transporte público, el BRT y el Tranvía, este jueves le han tumbado su propuesta de impuestos, tasas y precios públicos.
Urtaran no se ha enterado de que sólo tiene cinco concejales, ni pincha ni corta, por mucho que le guste jugar a los alcaldes. Está obligado a llegar acuerdos constantemente y tiene un problema: es muy torpe, no sabe. Cabrea a unos y otros con sorprendente facilidad y su incompetencia empieza a ser ya un secreto a voces dentro y fuera de la casa consistorial.
Sería todo muy divertido si no fuera porque este señor va a ser el alcalde de la ciudad todavía unos años más. La capital alavesa está condenada a retroceder con Urtaran al frente. Todos se están dando cuenta, incluso en su partido, pero él, en su tremenda soberbia, todavía culpa a todo el mundo de sus meteduras de patas y de su incapacidad. Se cree poco menos que un líder mundial y no le llega ni para a presidente de escalera. Un mediocre que nos condena a todos a una legislatura desastrosa.
