(EFE).- Las playas de Ereaga y Arrigunaga, ambas en Getxo (Bizkaia), y los arenales interiores del embalse alavés de Ullibarri-Gamboa lucirán este año banderas azules, un distintivo que distingue la calidad de sus servicios.
De esta manera Euskadi contará con cinco banderas, una menos que el año pasado. En el País Vasco sin embargo la mayoría de los ayuntamientos, con el apoyo de las diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa, se decantan desde 2007 por certificaciones medioambientales, como las ISO 9001 y 14001 o la certificación europea EMAS, y no presentan solicitudes para las banderas azules.
Se ha dado a conocer en Madrid la relación de playas y puertos deportivos españoles distinguidos con este emblema. Un total de 579 playas, 100 puertos deportivos y 5 embarcaciones turísticas sostenibles lucirán este año la bandera azul que acredita el buen estado de conservación y la calidad de los servicios que presta.
Con estos datos, España vuelve a liderar el ranking mundial de banderas azules, al frente del cual se sitúa de forma ininterrumpida desde 1987. No obstante en 2017 habrá siete playas españolas menos con esa insignia.
Ese descenso se debe, entre otros problemas, al aumento de las exigencias en materia de depuración de aguas residuales o urbanas, a la ley de costas, a la calidad de agua -«que tiene que ser excelente, no buena»- y a la falta de socorristas.
En el caso de Euskadi repetirán por segundo año consecutivo las playas interiores de tres municipios en un mismo embalse, el de Ullibarri-Gamboa (Álava). En concreto de trata de las playas de Garaio Sur, en Barrundia; Garaio Norte, en Elburgo, y Landa, en Arrazua-Ubarrundia.
En el caso de Bizkaia vuelven a conseguir la distinción las playas getxotarras de Ereaga y Arrigunaga, aunque se cae de la lista la de Ea.
Este distintivo internacional premia el cumplimiento de unos estándares establecidos tales como la accesibilidad, la calidad de las aguas, la información ambiental dirigida a los usuarios y la existencia de servicios sanitarios y de salvamento, entre otros.
