El entrenador del Baskonia, Dusko Ivanovic, consideró este jueves que su equipo está jugando «como si estuviese en pretemporada» y reclamó a sus jugadores que valoren «cada balón y cada posesión».
El técnico admitió en la rueda de prensa antes de medirse este viernes al Armani Milán que tienen que corregir «muchas cosas» y recordó que en los dos últimos partidos alcanzaron las 20 pérdidas de balón.
«Así es muy difícil jugar. Esto se puede hacer en pretemporada pero en partidos oficiales no», consideró el montenegrino, que expresó que tienen que «jugar mucho más rápido y mucho más agresivo».
«Tenemos que estar bien, no hay otra, esto es solo el comienzo y forma parte del deporte y de nuestro trabajo» manifestó el preparador azulgrana, convencido de que no deben mirar atrás y cada uno tiene que confiar en sí mismo.
Añadió que lo importante es «tener calma, trabajar» y que los jugadores se sacrifiquen y tengan «más concentración que hasta ahora».
Reconoció que en los dos últimos partidos «fue un problema grande jugar sin Baldwin -baja por paternidad- porque puede romper y crear tiros para los tiradores».
Además agregó que con el norteamericano pueden jugar «mucho más rápido y en situaciones de finales de posesión se puede generar su tiro».
Admitió que el equipo «está mal y no juega bien», pero advirtió que cree pueden ganar y confió en que sus jugadores también piensen como él. «Somos un equipo que siempre va a jugar para ganar, no importa contra quién ni dónde», zanjó.
«Hemos demostrado que podemos jugar buena defensa, que podemos tener carácter y que podemos luchar, pero esto no es suficiente», explicó.
Sobre Armani Milán remarcó que el año pasado jugó la Final a Cuatro y que este año tienen «mejor equipo» tal y como demostró en la primera jornada ante el CSKA.
«Tiene muchas situaciones de uno contra uno en posiciones exteriores. Todos juegan muy bien en transición y un ataque tienen sistemas que no son muy largos» dijo el balcánico, que señaló al rebote como otro de los problemas del Baskonia, aunque insistió en que no es cuestión de los jugadores interiores, sino de los cinco que están en la pista. EFE