El sol ha roto la tradición lluviosa que suele acompañar a la celebración de San Prudencio en Álava y ha animado a miles de alaveses a partir en romería hasta las campas de Armentia para disfrutar de los puestos de productos típicos y de artesanía y de las actividades para todas las edades preparadas para la ocasión.
Los más madrugadores han aprovechado, todavía con fresco y niebla, para acudir a la Plaza de la Provincia de Vitoria a escuchar el Zortziko de Álava y Zortziko de San Prudencio a cargo de Txistularis y la banda de Trompeteros y Atabaleros de la Diputación de Álava.
Esta no ha sido la única música que ha sonado en el centro de la ciudad por donde han vuelto a desfilar varias tamborradas de las sociedades gastronómicas, cuando se cumplen cincuenta años de su nacimiento.
No obstante, la celebración hoy como todos los días en honor al patrón del territorio se ha trasladado a las campas de Armentia, que un año más han recibido a miles de alaveses dispuestos a cumplir con la tradición, más si cabe en un día soleado que ha llegado tras varias jornadas pasadas por agua.
Aunque a primera hora el sol no calentaba demasiado, las gorras y las gafas de sol han sido los complementos más repetidos entre los viandantes que han enfilado la cuesta hasta la estatua del patrón.
Desde allí ha partido la comitiva de las autoridades, con el lehendakari, Imanol Predales, el diputado general de Álava, Ramiro González, la presidenta de las Juntas Generales Irma Basterra, y la alcaldesa de Vitoria, Maider Etxebarria, a la cabeza.
Cargos políticos de distintas instituciones, entre ellos la vicelehendakari primera, Ibone Bengoetxea, y la consejera de Alimentación, Desarrollo Rural y Pesca, Amaia Barredo, se han unido al defile.
La comitiva ha acudido a la tradicional misa que se ha celebrado en la Basílica de Armentia, que para primera hora ha colgado el cartel de completo con la presencia de los fieles más madrugadores.
Mientras tanto, los puestos de talos, rosquillas, y productos típicos para todos los gustos y bolsillos han abierto alrededor de unas campas en las que durante todo el día hay distintas propuestas como espectáculos infantiles y exhibición de deporte rural vasco.
La presencia de los más jóvenes, que son los que aprovecharán para descansar de una larga noche de fiesta en las campas, se hará esperar hasta más entrada la tarde, cuando habrá un concierto de Niña coyote y Chico Tornado, con el que se cerrará esta jornada festiva.
Ya lejos de las campas, el Museo Artium de Vitoria acoge este lunes la recepción oficial con motivo de esta festividad y la entrega de la Medalla de Álava al sacerdote natural de Amurrio Luis de Lezama, fallecido este año.EFE