La fachada vegetal del Palacio Europa es protagonista en la web arquitecturayempresa.es destacando su eficiencia energética y describiendo paso a paso su composición y elementos constructivos.

La citada web señala que el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz puso en marcha un proceso de ampliación y rehabilitación energética en el Palacio de Congresos Europa, construido en 1988, para mejorar la oferta congresual y expositiva de la ciudad, y al mismo tiempo aumentar su eficiencia energética, buscando así ser referencia para otros edificios. Con toda la reforma, este edificio público conseguirá ahorros del 70% con respecto a los consumos iniciales.

En la primera fase del proyecto, los estudios Urbanarbolismo y Singulargreen junto a Urbaser y Zikotz, dentro del proyecto de anillo verde interior, llevaron a cabo la realización de una fachada vegetal con el propósito de traer los ecosistemas de Álava al centro de la ciudad.

Esta fachada vegetal, que cuenta con más de 33.000 plantas autóctonas de la zona de Álava y el País Vasco,  tiene una superficie total de 1.492 m2. Aproximadamente 1.000 m2 son jardín vertical del sistema f+p hidropónico, los restantes 492m2 son de plantas trepadoras que cubren los ventanales.

El sistema f+p destaca por su bajo peso, rapidez de montaje y fácil mantenimiento, ya que las especies pueden sustituirse fácilmente sin afectar al resto del jardín. Consiste en una estructura portante metálica sobre la que se dispone un trasdosado de paneles plásticos. En estos paneles se fija una combinación de fieltros donde se anclan las raíces y circula una solución de riego hidropónica.

Los ecosistemas que conforman el entorno de Vitoria-Gasteiz quedan reflejados a lo largo del recorrido de la fachada. De izquierda a derecha aparece la vegetación de los Humedales de Salburua, las parcelas agrícolas del campo de Álava, los ecosistemas de los cerros margosos y los hayedos de los montes de Vitoria.

El edificio cuenta con un zócalo de acero corten retroiluminado en el que se explica la procedencia de las especies vegetales que reproduce el jardín vertical. Prácticamente la totalidad de las especies escogidas son autóctonas de la región, pionero en este aspecto. El zócalo no sólo es un elemento informativo sino que se construyó también como banco corrido constituyendo un espacio social de descanso dentro de un parque vertical.

Ante la dificultad de adaptación de algunas plantas a entornos más húmedos los responsables del proyecto rediseñaron el sistema f+p, utilizando un sistema hidropónico para mantener el jardín que confiera al sustrato las condiciones óptimas de nutrientes, pH, conductividad y humedad para el tipo de vegetación plantada, éste está totalmente monitorizado mediante control remoto con el fin de controlar el desarrollo de las plantas y ahorrar agua y energía.

Recorriendo la fachada de izquierda a derecha el primer ecosistema que encontramos es el Humedal vertical, en el que se han utilizado especies propias de los humedales de la zona. En el centro de la fachada se reproduce la estructura de las parcelas del campo de Álava mediante perfiles de aluminio, se ha reservado un espacio para huerto vertical en el que se organizará la plantación según temporada. En la zona norte de la fachada se dispone el Bosque vertical estructurado a partir de un río, reproduce los cerros y montes de Vitoria, los perfiles metálicos se articulan de forma más orgánica.

Los grandes ventanales quedan cubiertos por enredaderas caducifolias que protegerán el edifico del calor en verano y permitirán el soleamiento en invierno. La naturaleza ha invadido ya totalmente el jardín ya que ha sido colonizado ya por aves e insectos.

 



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