Los atascos que provoca el caos de tráfico creciente en Vitoria llegan frente a las salidas de garajes. Y claro, más de uno se las ve para incorporarse a la carretera.
Hay un vitoriano que ha dado una idea sobre su caso concreto y que podría servir para muchos más. Aunque el Ayuntamiento de Vitoria ha lanzado un jarro de agua fría sobre la propuesta. Al menos, de momento.
«Con todas las obras y demás cambios de ha desviado más tráfico del que ya había por la calle Elvira Zulueta. Es muy complicado salir de nuestra vivienda con el coche ya que debido a la densidad de tráfico y el semáforo que hay y su duración se quedan los coches parados delante de nuestra salida de coches.
Solicitó marcar en la vía unas rayas amarillas que respeten las salidas de coche de nuestro vado».
Caos el de esta mañana hacia las 8:00 entre ITURRITXU y MENDIZORROZA a 10 por hora todo el tramo.
Estoy aburrido de tener que soportar semejantes atascos en una ciudad como Vitoria.
¿No tenemos derecho ni a ir a trabajar tranquilos????
hay que jod*er a todos loa vitorianos apra que uno o dos paseen por con chochogorris , por que el resto no los usa
Un poco de cortesía a los que se incorporan al tráfico tampoco viene mal
BEI fuera ya…y por supuesto todos los responsables de dicho desastre…una ciudad en la que no había atascos….qué vergüenza…
Se están cargando Vitoria! A como ellos pueden ir andando o en taxi!!
A los responsables habría que prohibir usar transporte privado de por vida.
No, ya se la han cargado. Y CON NUESTRO DINERO.
Otro tanto de lo mismo en garajes repartidos por Vitoria, como los de la calle Federico Baraibar que para acceder a ellos en vez de recorrer 100 metros como hasta ahora obligan a recorrer más de 1.000 desde Jacinto Benavente pasando por Florida, Los Herrán, Eduardo de Velasco y José Lejarreta obligatoriamente. Y todo ello con pasos de cebra y semáforos a porrillo y retenciones continuas y conducción no ya a 30 sino a paso burra.
Esta es la idea que aplican los lumbreras que gestinan la ciudad con nuestros impuestos para hacer de Vitoria una ciudad ecológica, limpia y ordenada, libre de contaminación y conducción relajada. Lo dicho, ¡qué lumbreras!.
Por no ceder el paso no lo hace ni la policía municipal.