Es la máquina de tabaco en Vitoria donde compran fumadores y no fumadores. El aparato que puede hacer millonarios estas navidades. Y la novedad que sorprende. Una máquina de tabaco despacha lotería.
El restaurante que convierte una máquina de tabaco en fábrica de sueños está en Jundiz. Y lleva ese nombre.
Los hosteleros se exprimen la cabeza. No solo sirven menús del día: también reparten ilusión navideña… desde una máquina de tabaco.
Una de las máquinas expendedoras del local se ha convertido en el epicentro de una revolución lúdica. Clientes hacen cola para comprar su décimo de Lotería de Navidad. Pero no es una compra cualquiera.
El misterio de la caja mágica
Cada décimo cuesta 20,20 euros. ¿El motivo de esos 20 céntimos extra?
El boleto viene dentro de una cajita. Pero aquí viene la jugada maestra: si devuelves el envoltorio en la barra del bar, te reembolsan los 20 céntimos. “Es como el tapón de la gaseosa, pero con premio potencial de millones”, bromea un cliente.
Creatividad hostelera
Se exprimen la cabeza para atraer clientela y dar servicio. Y en este caso se quitan el marrón de andar con billetes de la administración de lotería. ¿Por qué no tentarles con la suerte?”
La idea ha sido un éxito. Algunos clientes compran el décimo, devuelven la caja, se toman un café con los 20 céntimos y se marchan con una sonrisa. Otros se quedan a comentar estrategias de la suerte. Otros los dejan de propina. Y todos, fumadores o no, coinciden en algo: “¡Esta máquina tiene más magia que el Gordo!”
¿Será este el año en que la suerte salga de una máquina de tabaco? En Jundiz, ya están preparando el cava… por si acaso.
