La patronal del metal de Bizkaia (FEVM) y los sindicatos se han vuelto a reunir este miércoles sin avances en la negociación del convenio, según han admitido ambas partes, tras lo cual el sindicato ELA ha apostado por llevar al sector a una huelga indefinida.
En este conflicto los sindicatos van por separado, con ELA por un lado y el resto (CCOO, LAB, UGT), por el otro. Tras cinco jornadas de huelga que terminaron el 2 de diciembre y terminado el «puente» festivo, las dos partes han reanudado este miércoles las negociaciones, pero sin resultados.
El motivo es que en el encuentro de hoy no ha habido nuevas propuestas; mientras los sindicatos han acusado a la patronal de no proponer mejora alguna y ceñirse a la presentada el 25 de noviembre, la patronal considera que son los sindicatos los que tienen que desbloquear la situación.
La mayoría sindical formada por CCOO, LAB y UGT ha explicado que ha «forzado» una nueva reunión para el próximo 21 de diciembre en la que realizará una «nueva propuesta, que seguirá siendo negociadora».
«Tenemos claro que la movilización surte efecto y que llegado el caso será necesario continuar por el camino de las huelgas, pero es necesario señalar que la única parte que hoy ha hecho mención a nuevas huelgas ha sido la FVEM, llegando a retar a los sindicatos diciéndoles ‘haced las que queráis'», ha señalado los tres sindicatos.
En cambio, ELA ha apostado por una huelga indefinida «hasta que se consigan los contenidos que se merece el sector», como incrementos inmediatos del IPC para todo el sector.
Por la parte empresarial también se ha reconocido que no ha habido avances «puesto que los sindicatos continúan sin hacer modificaciones relevantes que posibiliten llegar a acuerdos».
La patronal ha recordado que antes de las huelgas propuso una oferta que «mejora las condiciones que se han firmado en otros convenios vascos como el del metal de Álava», que a los sindicatos les parecía «histórico» y ahora es «insuficiente».
A partir de ahora, las empresas del metal de Bizkaia, ha advertido la FVEM, «pasan a una situación de escucha».
FVEM continuará asistiendo a la mesa, «pero las empresas ya están en el límite de lo que pueden ofrecer. Es hora de que los sindicatos hagan un ejercicio de responsabilidad y revisen sus peticiones, con una perspectiva más realista», ha concluido. EFE