Notificada la sentencia del

La Audiencia de Álava ha aceptado que el empresario Josu Azkarraga Montes, otro de los condenados del caso De Miguel, el mayor proceso de corrupción juzgado en Euskadi, no ingrese en prisión y ha suspendido la pena de cárcel, a cambio de pagar una multa de 6.940 euros o por 347 días de trabajos comunitarios.

Josu Azkarraga Montes es un empresario cultural que era, junto a Iñaki San Juan, amigo personal del principal miembro de esta trama corrupta, Alfredo De Miguel.

Invirtió hace unos años sus apellidos -cuando comenzó el proceso judicial se llamaba Josu Montes Azkarraga-.

Este exmilitante del PNV fue miembro del Consejo Asesor de Planeamiento Urbanístico de Bilbao y, según EH Bildu fue nombrado «a dedo» por su partido. Ya en 2015 la coalición abertzale pidió su destitución inmediata de ese órgano dada su implicación en el caso De Miguel.

En esta trama estaba acusado de haber urdido junto a los tres principales imputados y sus esposas un sistema para obtener ingresos a través de la adjudicación irregular de contratos menores y la Fiscalía pidió para él 17 años y medio de cárcel.

Finalmente el Tribunal Supremo modificó su condena inicial y separó los diferentes delitos que se le imputaron, de forma que ninguno superaba los dos años de cárcel.

Concretamente le impuso dos años de prisión por un delito continuado de malversación de fondos públicos en concurso ideal con un delito continuado de falsedad en documento mercantil, penado con 1 años y 9 meses de cárcel, así como a otro año de prisión por un delito de asociación ilícita.

La Audiencia de Álava ha acordado suspender la pena de Azkarraga durante un periodo de cinco años, igual que hizo en otro auto respecto a otro de los encausados, Iñaki San Juan, condenado también a cuatro años y nueve meses.

Como condición para no entrar en la cárcel deberá pagar una multa de 6.940 euros o bien hacer trabajos en beneficio de la comunidad durante 347 días.

El auto explica que se suspende la pena de prisión porque es la primera vez que Azkarraga delinque, ninguna de las penas impuestas supera los dos años, ha satisfecho ya las responsabilidades civiles que se le impusieron y además fue el propio Tribunal Supremo el que decidió separar las condenas.

No obstante, no podrá delinquir en el plazo de cinco años de suspensión, ya que de lo contrario esta medida se podría revocar.

La semana pasada la Audiencia alavesa ya se pronunció en sendos autos sobre las peticiones de suspender la ejecución de la pena presentadas por otros cinco condenados con penas que no superan los dos años: Ainhoa Bilbao (mujer de Alfredo de Miguel), Iratxe Gaztelu-Urrutia (esposa de otro de los cabecillas de la red corrupta, Koldo Otxandiano), Iñaki Echaburu, Josu Arruti y Sergio Fernández, a los que se suman Iñaki San Juan y Josu Azkarraga.

Por el momento el único que ha entrado en la prisión alavesa de Zaballa ha sido el exdirector de Juventud del Gobierno Vasco Javier Sánchez Robles, condenado a 7 años y 1 mes.

La Audiencia ha desestimado ya las alegaciones presentadas por De Miguel y todavía tiene que pronunciarse sobre los otros dos condenados con penas que implican su ingreso en prisión: el exdirigente del PNV Aitor Tellería (condenado a 5 años de cárcel) y su compañero de partido Koldo Otxandiano (7 años y 6 meses). EFE



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