ducha vestuarios desnuda

A muchos vitorianos les invade la pereza durante la cuarentena, viven el día de la marmota, apenas salen de casa para sacar la basura o ir al supermercado (tal y como debe ser), y prescinden de la ducha por pereza o por sudar menos de lo habitual.

Evidentemente, aquellos que salen a la calle para ir a trabajar, tienen que mantener una higiene especialmente pulcra para evitar contagiarse del Covid-19. Además de lavar bien la ropa, limpiar adecuadamente todos los objetos que toquen, etcétera.

Por otro lado, muchos vitorianos están aprovechando para realizar ejercicio físico desde casa, por lo que, en este caso, pasar por la ducha también es indispensable.

En cambio, si no vamos a trabajar fuera de casa ni hacer deporte…

No es necesario ducharnos más de una vez al día, ya que tal y como determinan los dermatólogos, un lavado desmesurado implica la pérdida de aceites naturales, lo que supone la desprotección de las células de la piel.

Durante el confinamiento nuestra rutina ha cambiado considerablemente.

La actitud en estos momentos es clave para no sentirnos bajos de ánimo. Los psicólogos que se han pronunciado sobre el tema han destacado que es importante mantener ciertos hábitos y horarios en nuestra casa para llevar a cabo una estabilidad.

Por ello, una ducha, además de fomentar nuestra higiene personal, nos ayuda a despejar la mente. Además, ahora que disponemos de más tiempo libre, puede ser un buen momento para dedicar un espacio a nuestro bienestar y disfrutar de un baño con sales aromáticas y música de fondo. Eso sí, sin pasarnos ya que en una bañera estándar se desperdician alrededor de 230 litros de agua.

 



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