El Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz y Osakidetza han acordado extender a Salburua la colaboración para que las y los profesionales de Atención Primaria del centro de salud del barrio receten acudir al centro cívico.
Esta iniciativa, puesta en marcha en Zabalgana en mayo de 2023, ha resultado un éxito, con medio centenar de personas que han iniciado actividades para mejorar su salud física y mental. El próximo 1 de marzo comenzará la entrega de las recetas por parte del personal médico y de enfermería aunque el programa está abierto a que cualquier profesional sanitario del centro de salud pueda hacerlo.
La red de centros cívicos de Vitoria-Gasteiz tiene una amplia trayectoria de colaboración con los centros de salud de sus barrios y en la realización de actividades destinadas a mejorar la salud de la población. En Judimendi, Arana, Arriaga, Ibaiondo, Iparralde, Hegoalde, El Pilar, Txagorritxu, Gazalbide, Casco Medieval y Lakua se desarrollan desde hace años diversas iniciativas. Desde la presencia de un o una animadora sociocultural en los centros de salud para informar sobre las actividades de los centros cívicos beneficiosas para la salud hasta recetas y paseos saludables, pasando por la prevención de la salud infantil o la lucha contra la soledad no deseada. A menudo estas iniciativas son fruto del trabajo conjunto que realizan en la red de cada barrio todos los colectivos que trabajan en el mismo.
En esa línea, en mayo de 2023 se dio un paso más con la puesta en marcha en Zabalgana de un programa de colaboración entre Osakidetza y el Ayuntamiento por el que las y los profesionales de Atención Primaria recetan acudir al centro cívico. “Así como suena, el personal médico o de enfermería, pero también de fisioterapia o de salud mental prescribe a sus pacientes ir al centro cívico y ello se acompaña de una receta en la que se indica el tipo de actividad que más le conviene”, ha explicado la concejala de Gobierno abierto y Centros cívicos, Miren Fernández de Landa. En esa receta, el personal sanitario marca el o los ámbitos que convendría trabajar a cada persona: actividad física, bienestar emocional, alimentación, cultura o encuentro.
Valoración muy satisfactoria
Esta experiencia piloto ha dado buen resultado y ya se ha acercado medio centenar de personas al centro cívico para informarse y ver qué actividades pueden ayudarle a tener mejor salud, tanto física como mental. La valoración es muy satisfactoria por parte de los colectivos y personas que están haciéndola posible y beneficiándose de ella.
En Zabalgana, fue una médica la que plasmó ese deseo de colaboración al centro cívico trasladando la voluntad del colectivo de “recetar centro cívico”. La acogida de la idea por parte del Ayuntamiento fue total y enseguida se diseñaron e imprimieron las recetas -semejantes a las que sirven para prescribir medicinas- y acondicionaron el denominado ‘punto de bienestar’ en la sala de encuentro del centro cívico, que atiende a estas personas en horario de mañana –de 10:30 a 13:30 horas- porque hay menos afluencia de público y es más fácil dedicarles atención personalizada en óptimas condiciones.
“Había que organizar la acogida a esas personas procedentes del centro de salud, por lo que establecimos el lugar donde escucharles para ver sus necesidades y ofrecerles información y orientación sobre el amplio abanico de actividades de todo tipo que ofrecemos en los centros cívicos. Hay que tener en cuenta los problemas de salud a veces no tienen un origen estrictamente sanitario, sino social y ahí también hacemos una importante labor en nuestra red de centros”, ha resaltado la concejala.
Una vez acordadas con cada persona las actividades más adecuadas y de su agrado, se les ofrece el acompañamiento que precisen para arrancar con ellas y para hacer una valoración al cabo de un tiempo con el fin de comprobar si se ha acertado o prefieren nuevas experiencias.
Ahora ha llegado el momento de extender la iniciativa a otra zona de la ciudad y tanto Osakidetza como el Ayuntamiento han acordado que sea en Salburua. Todo está preparado para que el próximo 1 de marzo arranque la distribución de las recetas y se comience a recibir a las personas que la lleven en el ‘punto de bienestar’ si bien las personas que se acerquen sin ella serán igualmente atendidas.
Problemas más comunes
En esa búsqueda por mejorar la salud y el bienestar, en los meses de experiencia en Zabalgana se ha comprobado que no todas las personas que reciben la receta acuden al centro cívico, pero entre las que sí lo hacen destacan los problemas de soledad y ansiedad, de alimentación incorrecta o de falta de ejercicio. Como consecuencia, el centro cívico de la zona Oeste de la ciudad ha acondicionado parte de su oferta para atender esas necesidades concretas. También destaca que hay un perfil predominante entre las personas que acuden: más de la mitad son mujeres de entre 40 y 60 años. Y que muchas de ellas desconocen el gran abanico de actividades que se realiza en los centros cívicos.