El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, reconoció que su equipo, que jugó el tramo final con dos jugadores más que el Alavés, que sufrió la expulsión de dos jugadores, no supo jugar «con superioridad numérica».
El técnico consideró que el partido dio para “mucho”. “El primer tiempo fue normal y el segundo tiempo tuvo muchas circunstancias”, explicó el asturiano, que celebró que la lesión del meta vitoriano Antonio Sivera, que por unos momentos quedó inconsciente, terminara solo «en un susto”.
“A partir de la expulsión hubo muy poco juego, mucho parón y mucho jugador del Alavés en el suelo”, consideró el entrenador del Villarreal que ensalzó la determinación del conjunto local “en las áreas”.
“En el último cuarto de hora fuimos capaces de dominar, pero antes no”, lamentó el entrenador, que explicó que estuvieron “fuera de posición y en una situación más cómoda que productiva”.
“Finalizamos muchas jugadas por dentro con poco peligro y tuvimos muchas pérdidas de balón y poco desmarque”, manifestó Marcelino. EFE
