El beneficio de Tubacex en el primer trimestre del año cayó un 62,1 %, al pasar de 12,7 millones en el arranque de 2023 a los 4,8 actuales, pero espera una «mejora progresiva» en lo que resta de ejercicio y augura «un fuerte crecimiento en 2025.»
El grupo fabricante de tubos de acero sin soldadura con sede en Llodio (Álava) ha informado este jueves de que las ventas consolidadas entre enero y marzo han bajado un 19,7 %, de 232,2 a 186,5 millones de euros.
La firma alavesa considera en todo caso que se trata de una «reducción coyuntural» que achaca a «una tendencia decreciente del precio del níquel, al aumento de la cifra de existencias correspondientes a proyectos que se facturarán en los próximos trimestres y a que la puesta en marcha de ciertos proyectos de Petrobras previstos para el primer semestre tendrá lugar en la segunda mitad del año».
El ebitda se situó en 25 millones (un 18 % menos que en el primer trimestre de 2023) y el margen ebitda en el 13,4 % (13,1 % hace un año). La compañía cree que los retrasos del primer trimestre se recuperarán en el segundo semestre, lo que permitirá aumentar la facturación, el ebitda y el beneficio.
Las expectativas de cara al conjunto del ejercicio son «buenas» porque Tubacex espera «una mejora progresiva de los resultados trimestrales» y un segundo trimestre «con niveles de captación que permitirán anticipar un fuerte crecimiento en 2025».
El grupo vasco destaca además que la entrada de pedidos se mantiene en niveles «muy altos, tanto en volumen como en margen» y que la ratio de contratación sobre ventas se sitúa en torno a 1, lo que es «signo de la buena salud».
En concreto, la cartera de pedidos se sitúa en 1.600 millones de euros (similar al cierre de 2023), lo que asegura el negocio de Tubacex para los próximos años.
«Solidez financiera»
La compañía ha destacado en una nota su «solidez financiera» con una posición de liquidez cercana a los 190 millones, a pesar de que está construyendo la nueva planta en Abu Dabi dentro del «gran proyecto de 1.000 millones de dólares» que arrancará sus operaciones a final de este año.
Hasta la fecha la inversión realizada en este proyecto asciende a la cifra de 30,7 millones. Además, parte de la caja generada en este arranque de 2024 se ha destinado a una inversión estratégica en utillajes para el grupo NTS. Se trata de «dos apuestas aseguran a futuro una posición competitiva de Tubacex en Oriente Medio».
La deuda financiera neta de la compañía es de 364,1 millones e incluye estas dos inversiones «estratégicas» y el incremento de 45,4 millones de euros de circulante.
En el primer trimestre el 42 % de las ventas se hicieron en Asia y Oriente Medio, donde Tubacex cuenta con una gran exposición al segmento del gas, tanto para su extracción como para su procesado; el 23 % en América, el 31 % en Europa y el 4 % en África.
El consejero delegado de la empresa, Jesús Esmorís, ha valorado que los resultados del primer trimestre tienen «unos altos niveles de rentabilidad» y se ha mostrado «optimista» para el conjunto de ejercicio, «un año que irá de menos a más».
Ha destacado además que Tubacex ya ha recibido «el primer pedido dentro del ‘macro contrato’ con ADNOC (Compañía Nacional de Petróleo de Abu Dabi), un hito fundamental que supone la puesta en marcha del proyecto, esperándose además más pedidos relevantes durante el año».
La empresa alavesa de tubos ha reiterado su objetivo de lograr en 2027 unas ventas de entre 1.200 y 1.400 millones de euros y un Ebitda superior a los 200 millones. EFE