La dirección de Tubacex ha propuesto reducir a 134 los 150 despidos previstos en el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que ha planteado para las plantas alavesas de Amurrio y Llodio.
Así lo han indicado a Efe fuentes del comité de empresa tras la reunión que ambas partes han mantenido este martes en el marco de la negociación de ese ERE y del ERTE que la dirección ha planteado para el resto de la plantilla, integrada por unos 800 trabajadores.
En el encuentro de hoy los representantes sindicales han mantenido la exigencia de que se retire el ERE y que se negocie el ERTE, algo a lo que se niega la dirección de Tubacex, que asegura que los problemas de la compañía son estructurales motivados por la crisis internacional y la caída de pedidos frente a un comité que opina que los problemas son coyunturales y plantea medidas temporales en lugar de despidos.
También han explicado que la mayoría sindical, ELA, CCOO, STAT e Independiente, ha presentado una segunda propuesta que pasa por prejubilaciones para los nacidos en 1966 y anteriores con unas condiciones del 100 % de cobertura, así como por la posibilidad de que haya excedencias voluntarias de 3 años cobrando 1.500 euros. También ha planteado indemnizaciones por bajas voluntarias de 60 días por año trabajado.
Son todas ellas medias «no traumáticas» y «voluntarias» porque siguen manteniendo su objetivo de «despidos cero», han explicado.
Además esto debería ir acompañado de un compromiso del empleo en los siguientes 10 años y de la no externalización de puestos de trabajo. Respecto al ERTE, la mayoría sindical ha reclamado un complemento del 100 % del salario y poder generar las vacaciones y pagas extras.
LAB no ha entrado en esta propuesta ya que, según ha explicado un representante de esta central, la dirección no ha justificado suficientemente que haya que tomar medidas estructurales ante una crisis que ellos consideran es coyuntural y para ello la «mejor solución» pasa por negociar un ERTE.
La dirección de Tubacex ha mantenido que «está lejos» de esas propuestas y ha planteado reducir el número de despidos a 136 y aumentar la indemnización de las salidas forzosas a 25 días por año trabajado con un límite de 18 mensualidades.
Fuentes sindicales han explicado que de los 150 despidos que se plantean en el ERTE, 41 corresponden a puestos que van a ser subcontratados una vez que se ejecuten las salidas. La dirección plantea ahora reducir en 16 esos puestos a subcontratar por lo que bajaría a 134 los despidos.
Las partes están citadas a una nueva reunión el próximo jueves y el martes próximo, día 9, está fijada la última reunión de esta fase negociadora.
La pasada semana los representantes de los trabajadores se reunieron con miembros del Departamento que lleva el área de industria en el Gobierno Vasco que se ofreció para mediar en el conflicto para evitar los despidos en la empresa.
En este sentido, la consejera de Desarrollo Económico, Arantxa Tapia, instó también a la dirección y a los trabajadores de Tubacex a que se sienten a negociar de forma «civilizada» en aras a pactar «hacer un esfuerzo ahora» que sea revertido cuando la empresa vuelva a «una situación de bonanza».
Los trabajadores de las plantas de Llodio y Amurrio llevan desde el pasado 15 de febrero en huelga indefinida y diariamente llevan a cabo movilizaciones para visibilizar su situación.
Tubacex cerró 2020 con unas pérdidas de 25,3 millones de euros, que provienen mayoritariamente de los resultados negativos de las plantas vascas, frente a los 11 millones de beneficio que tuvo el año anterior. EFE