Extraños delincuentes en Vitoria: El desagradecido y el torpe

Sigue la delincuencia en Vitoria, pero esta vez con dos comportamientos extraños de dos protagonistas. El «desagradecido» y el «torpe».

DESAGRADECIDO

La Policía Local detuvo a dos varones de 30 y 26 años como presuntos autores de sendos delitos de atentado a agentes de la autoridad y lesiones, respectivamente.

Los agentes asistieron a uno de los agredidos. Y como agradecimiento se enfrentó con los policías. Ocurrió en Arana.

EL TORPE

Robó un bolso con el móvil de la víctima dentro y olvidó apagarlo, por lo que fue localizado gracias a los sistemas de geolocalización. Además

Agentes de Policía Local detuvieron a un varón de 26 años como presunto autor de un delito de atentado a agentes de la autoridad tras la sustracción de un bolso de un coche estacionado en al calle Logroño, mientras su propietaria cargaba una planta en el mismo.

A través de la geolocalización de un teléfono móvil guardado en el bolso, la policía pudo dar con una vivienda del barrio de Arana donde tenía conocimiento de que vivían personas conocidas por su implicación en la comisión de delitos.

Una vez en el domicilio, una de estas personas arremetió contra los agentes para tratar de huir, por lo que fue detenida. Entre sus pertenencias llevaba el móvil y dinero de la víctima que fueron devueltos.



5 Comentarios

  1. «vivían personas conocidas por su implicación en la comisión de delitos.»
    Rateros de Vitoria. Cada día hay más….y también rateros de políticos vendiéndose al mejor postor, por un puesto de poder ….

  2. Quisiera que aclararan si esa vivienda donde viven «delincuentes conocidos implicados en delitos» la estoy pagando yo con mis impuestos, gracias a nuestro nefasto sistema social, o la están pagando los delincuentes gracias a sus habilidades.
    Si la pago yo quisiera que echarán del sistema público a políticos y funcionarios responsables de subvencionar viviendas a delincuentes conocidos en plena actividad antisocial.

  3. «Si la pago yo quisiera que echaran…»
    ¡Vas dado, amigo! En este país a estos miserables políticos profesionales, todos mamandurrios de la caja pública, no los echamos ni con agua hirviendo. Buena prueba de ello se ha visto el pasado día 28 de mayo. Mismos perros con los mismos collares.

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