El sector del vino se muestra dividido sobre qué «medidas de crisis» activar ante la caída del consumo provocada por la pandemia, aunque sí reclama al unísono que se cuente con un presupuesto específico y no se retiren fondos de otros programas de ayudas públicas.
Así se desprende de los resultados de un cuestionario enviado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y conocido esta semana, a los diferentes representantes del sector vitivinícola español, en el que se recuerda que Bruselas ya ha descartado «fondos adicionales» al no haber «margen» en los presupuestos para ello.
De hecho, en principio estas «medidas de crisis» serán sufragadas con una parte de la dotación con la que cuenta el Programa de Apoyo al Sector del Vino (Pasve), financiado por la UE y que habitualmente se destina a la promoción internacional, la reconversión de viñedos y las inversiones en bodegas.
La cosecha en verde -recoger el fruto antes de lo que se hace habitualmente-, la destilación de crisis -para sacar producción del mercado dirigida a otros usos- y el almacenamiento privado -dar ayudas para retener cierta cantidad de vino a la espera de que la demanda se recupere- son las soluciones planteadas.
La Federación Española del Vino (FEV) ha reclamado un presupuesto específico sufragado con fondos comunitarios o nacionales diferente al Pasve, y en el caso de que no sea posible ha defendido que no se reduzcan los apoyos a «medidas de promoción en terceros países y en inversiones».
La patronal -que representa los intereses de las bodegas- ha abogado por «dar prioridad al almacenamiento privado» sobre el resto de las medidas.
Responsables de Asaja han explicado a Efeagro que aunque hay «diferentes opiniones» dentro de la organización, existe «unanimidad» a la hora de defender que hacen falta más ayudas dada la «calamitosa» situación del sector debido a su estrecha relación con la hostelería.
La entidad considera que no tiene sentido, por ejemplo, retirar fondos a la promoción internacional para solucionar una cuestión «coyuntural» como es la covid-19, y prioriza «otras medidas» antes que el almacenamiento privado por creer que esta última sólo «retrasaría el problema».
COAG, por su parte, ha abogado frente al Ministerio por la opción de la cosecha en verde, ya que «es la única actuación que elimina materia prima del mercado incluso antes de su transformación en vino». EFEAGRO